El encuestador Alfredo Keller (Keller y Asociados)
recuerda que cuando Daniel Ortega era presidente, (la primera vez), en
Nicaragua, todas las encuestas lo daban como favorito para la
reelección, pero al final ganó Violeta Chamorro: "sólo una encuestadora
la pegó (Borges y Asociados). Ellos partieron de la premisa de que el
electorado sentía miedo de responder y utilizaron un lápiz donde
aparecía la palabra Uno, que era la Unidad Nacional Opositora de Violeta
Chamorro. Así el encuestado supuso que no estaba ante un espía del
gobierno y la gente respondió como realmente pensaba votar.
-Otra manera es no hacer la encuesta y presentar una farsa total.
-Esa piratería es muy primitiva y si en el pasado se hacía, ahora es
imposible. Yo tengo 34 años en esto, he participado en más de 170
campañas en 17 países de América Latina. Y en casi todas las campaña ha
habido guerra de encuestas. Hace 20 años las encuestas se inventaban y
las publicaban personas que le daban un nombre ficticio a una
encuestadora fantasma, generalmente con nomenclatura norteamericana
porque hay el mito de que esos no se equivocan.
-Entonces, ¿se están usando las encuestas como arma electoral?
-Aquí la encuesta está siendo utilizada como un instrumento de
propaganda, tal y como ocurre en muchas partes. Pero ese no tiene
sentido porque nunca se ha podido comprobar que la guerra de encuestas
de los resultados esperados.
-Que son los de inducir a los electores a votar por alguien que, según las encuestas amañadas, está ganando por paliza.
-Se busca crear un clima de invencibilidad del presidente Chávez para
compensar la debilidad de su enfermedad. Ante el debate de si puede o no
seguir gobernando y en campaña, se contrapone ese rasgo de
invencibilidad. No importa lo mal que está, el tipo va a ganar. Se
busca, también, sacar del debate la capacidad o incompetencia del
candidato a la hora de participar en la campaña. Así se lograría darle
la confianza a sus electores de que vale la pena votar por él.
Obviamente también aparece el objetivo de espantar a los financistas
potenciales del candidato opositor, quienes se negarían a hacer aportes a
una campaña que ya se considera perdida. Luego se busca el voto del
elector, que decide a última hora, para que termine votando a ganador Y
finalmente está el objetivo de convertir a la encuesta en instrumento de
propaganda.
-¿Por qué afirmas que no da resultados?
-Porque es muy difícil engañar la lectura y los sentimientos del
elector. La calle mata la encuesta como instrumento de propaganda. Por
eso la respuesta de Capriles es la correcta. Las grandes movilizaciones
en todas las ciudades pone a la gente a pensar: "Esto que dicen las
encuestas como que no es verdad".
-El recurso de las movilizaciones puede ser una demostración de
organización y de fuerza, pero no necesariamente es un indicador de
tendencias.
-Lo que se termina generado con esas encuestas es una gran confusión en
el electorado y así se anula el efecto que se pretende imponer con la
guerra de las encuestas. En este momento la gente ya no cree en ninguna
encuesta.
-Pero los comandos tienen encuestas sobre las cuales se basan para adelantar su estrategia.
-Es obvio y allí quien la contrata debe creer en la eficacia del
encuestador. Pero en otro terreno, finalmente el chavista cree en las
encuestas que avala el gobierno y el de opositor en las de la oposición.
-Es decir, el cliente (quien compra la encuesta) siempre tiene la razón.
-Yo tengo muchos años pateando este tablero y nunca nadie me ha pedido
eso (manipular resultados). Cuando llevas un resultado adverso te puede
decir qué decepción, o no lo divulgues, o qué podemos hacer para superar
eso. Pero nada más.
-¿No son para eso las encuestas?
-Así es. Exactamente. Para eso y no para otra finalidad.
-Cuando hablas de encuestas, ¿quieres decir que la proliferación masiva de información contradictoria proviene de ambos lados?
-No del lado de Capriles. El tiene su encuestadora, que no soy yo, por
cierto. Ellos también decidieron no participar en la guerra de las
encuestas. No hemos visto datos de ellos en los últimos meses. Por
tanto, están en la línea de lo que parece ser la estrategia de Capriles:
no confrontar. El gobierno quiere confrontar porque su candidato es
débil por muchas razones. Demasiados años gobernando, un cansancio
estructural evidente en los indicadores de los estudios. Pero débil,
también, no sólo por sus condiciones de salud sino porque la gente está
harta de los conflictos que no conducen a ninguna parte. A eso se le
sobrepone la realidad: el problema del desempleo, el costo de la vida,
la inseguridad.
-Ellos deben estar conscientes de eso.
-Por eso hacen tanto ruido. Tratan de anular los efectos de ea realidad y de una campaña que no pueden neutralizar.
-Sin embargo, la estrategia disolvente y agresiva es la misma de siempre. Chávez no hace otra cosa.
-Está en su genética.
-Pero le ha dado resultado.
-Cuando analizas los resultados electorales del 98 hasta ahora, Chávez
jamás obtuvo más de la mitad del padrón electoral. Y eso es así porque
el esquema de polarización busca anular el electorado que se niega al
conflicto. Pero al anularlo lo pierdes como factor decisor y eso es un
tercio del electorado. Al mismo tiempo, controlas una parte del
electorado y divides a la oposición en dos partes: una activa y la otra
que se anula por el conflicto. Por eso siguen aplicando la
confrontación. Pero Capriles comprendió esto y por primera vez la
oposición está rompiendo con la estrategia de la confrontación,
estableciendo un vínculo entre el opositor activo y el pasivo. Al
lograrlo consolidas una mayoría en términos cualitativos y lo que falta
es la fuerza para activarla electoralmente.
-Tienes constancia técnica de eso.
-Claro. Esa es la misma estrategia siempre.
-Entonces, si las elecciones fueran hoy ¿ganaría Henrique Capriles?
-Hoy no. Pero tal y como van la cosas podría ganarlas. Desde el punto de
vista técnico es absolutamente posible que las pueda ganar.
-¿Los tiempos dan para el cruce de líneas?
-Por lo que veo en los estudios de opinión pública, hay suficientes
elementos para creer que el resultado electoral tienda a una situación
de empate en donde hoy es imposible pronosticar el resultado. Hoy los
pierde, pero mañana no necesariamente.
-Todo depende de la tendencia. Si ésta es a que Chávez suba y Capriles baje, es imposible el cruce de líneas.
-Pero es que eso no está ocurriendo.
-¿La tendencia es todo lo contrario?
-La tendencia es todo lo contrario
-¿Hay razones para que eso deje de ser así?
-No hay ninguna razón. Antes de las primarias, cuando preguntabas a la
gente por quién votaría, Capriles le ganaba a Chávez. Luego las primaria
generan un gran entusiasmo por la participación con un nivel
imprevisto. Pero eso sólo dura nueve días. Después el presidente anunció
que el cáncer seguía allí. Inmediatamente hubo una apabullante campaña
de santificación y de sacralización de Chávez. Era san Hugo Chávez, con
misas, procesiones, velas rogatorias. Estaban, por otro lado, las
inmensas dudas sobre lo que estaba pasando. La preservación del secreto
sobre su enfermedad le permitió, que durante todo el segundo trimestre
del año, el único tema que se discutiera fuera el de Chávez. Era una
campaña no campaña para Capriles. Todo eso le permitió ocupar la agenda.
Henrique Capriles, mientras tanto, se dedicó al casa por casa, que es
un campaña de baja intensidad. Pero ahora sí arrancó la campaña y lo
hace con otros criterios. Chávez decidió que esa etapa de la enfermedad
fue superada . Así que mucho de lo que ha desarrollado como estrategia
carece de valor hoy en día. Pese al inmenso esfuerzo que hizo, con
recursos casi infinitos a su disposición, sus números no mejoraron y no
subió ni un punto y ni un solo voto. Después se produjo la guerra de las
encuestas para sustituir el debate de fondo. La encuesta es más
importante que los contenidos o la evaluación de la gestión
gubernamental.
-Estamos pasando de las encuestas, como plataforma de opinión pública
para desarrollar estrategias electorales, a las encuestas como parte de
esa estrategia electoral?
-EL CNE anunció que el lunes (mañana) publicará las normas para la
inscripción de las encuestadoras en el CNE. Las encuestadoras están
obligadas a inscribirse para que se autorice la divulgación de sus
resultados. Lo que busca esa legislación es detener el uso
propagandístico de las encuestas y su banalización, además de garantizar
un mínimo de seriedad profesional. Así es en los países con Estado de
Derecho y equilibrio de poderes. Se aplica una legislación que impide la
piratería.
-Entonces, ¿cuál es el problema?
-Yo espero ver las normas y que éstas no se presten a la manipulación
política. Es decir, que cuando el CNE avale técnicamente a alguien, no
lo haga con las encuestadoras piratas.
-En una situación de Estado de Derecho yo no tendría ningún resquemor a
la hora de inscribirnos en el CNE. Pero quiero ver las normas porque
éstas no dirán si de verdad se quiere enseriar el debate o se trata de
legitimar a advenedizos que aparecieron pontificando de un día para otro
con respuestas sesgadas. Y si lo que se busca es lo segundo, entonces
tendríamos dificultades.
-"Los advenedizos" podrían acudir al mismo argumento que tú esgrimes.
-Desde luego. Hay muchas manera de manipular encuestas. Una es a través
del diseño muestral. Yo puedo evitar una muestra aleatoria y concentrar
las entrevistas en un punto donde se aglomera la tipificación del voto
de mi candidato. O manipular el cuestionario, generando una baterías de
preguntas favorables a un determinado candidato y luego solicitar la
intención de voto.
Etiqueta: Venezuela, Encuesta.
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